Cerramientos de aluminio para Terrazas y Porches

En este artículo vamos a seguir profundizando en las posibilidades que el mercado nos ofrece para ganar espacio en nuestra vivienda. En esta ocasión analizaremos los sistemas de aluminio para el cerramiento de terrazas y porches.

Los sistemas de cerramientos de aluminio son una excelente opción para aprovechar al máximo el espacio al aire libre de nuestra vivienda. Estas estructuras de aluminio permiten cerrar o acristalar una terraza o porche, proporcionando protección contra el viento, la lluvia y otros elementos meteorológicos para disfrutarlos durante todo el año.

Hay varios tipos de cerramientos, con diferentes características y diferentes sistemas de instalación para elegir, por lo que es importante que consideres cuidadosamente tus necesidades y presupuesto antes de tomar una decisión.

Necesidades a cubrir por este tipo de cerramientos

Los cerramientos de aluminio destinados a terrazas y porches deben cubrir las siguientes necesidades:

Protección contra el viento y la lluvia. Deben garantizar la suficiente estanqueidad para protegernos de las inclemencias meteorológicas.
Aislamiento térmico y acústico. Deben estar equipados con sistemas de rotura de puente térmico (RPT) y con acristalamientos que permitan el aislamiento térmico y acústico deseado.
Ampliación del espacio habitable. Deben permitir el máximo aprovechamiento del espacio.
Máxima seguridad y privacidad. Si es necesario deberán estar equipados con sistemas de cierre y seguridad y deben permitir disfrutar de la luz natural sin necesidad de renunciar a nuestra privacidad e intimidad.

Tipos de cerramientos de aluminio para los espacios abiertos de la vivienda

Existen varios tipos de cerramientos de aluminio para estos espacios de nuestra vivienda que se clasifican por su sistema de apertura. Dentro de los sistemas que te enumeramos existen variantes que pueden permitir una mayor estanqueidad del cerramiento, una mayor versatilidad y más facilidad a la hora de accionarlos:

Cerramientos fijos

Son aquellos que no se pueden abrir ni cerrar. Estos son ideales para aquellos que buscan una solución permanente.

Los cerramientos fijos están diseñados para proporcionar una protección permanente contra el clima y permiten maximizar la cantidad de luz natural ya que, por lo general, necesitan menos perfilería.

Este tipo de cerramientos es el más económico de los tres ya que no necesita herrajes de cuelgue ni deslizamiento.

Cerramientos correderos

Son aquellos que se abren y se cierran mediante paneles correderos. Estos son ideales para aquellos que desean una solución más flexible. Los cerramientos correderos son una opción popular para aquellos que quieren tener la opción de abrir y cerrar su terraza o porche según las condiciones climáticas.

Los cerramientos con sistema de corredera permiten la apertura del 80% del cerramiento.

Estos cerramientos pueden ser manuales o motorizados, ya que dependiendo del peso de la carpintería y de sus dimensiones es conveniente motorizarlos para poder accionarlos con comodidad.

Cerramientos plegables

Los cerramientos plegables permiten que las hojas de vidrio o policarbonato se plieguen y se abran completamente, creando una apertura total en la terraza o porche.

Características

Las características de los cerramientos de aluminio que se emplean para los espacios abiertos de nuestra vivienda pueden variar dependiendo del tipo de cerramiento. Sin embargo, algunas características comunes incluyen:

Ligereza: el aluminio es un material ligero, lo que facilita su instalación y reduce el peso total de la estructura.
Alta resistencia a la intemperie y al desgaste: el aluminio es un material resistente y duradero, lo que significa que los cerramientos de aluminio para terrazas y porches son capaces de soportar las condiciones climáticas más adversas.
Personalización: los sistemas de aluminio para cerramientos son personalizables, lo que significa que se pueden adaptar a la arquitectura y el diseño de tu hogar.
Fácil mantenimiento y limpieza
Amplia variedad de colores y acabados
Máxima seguridad y privacidad
Excelente aislamiento acústico y térmico

Sistemas de instalación

Existen varios sistemas de instalación que van a influir en el precio final del cerramiento. Los tipos de instalación más habituales son:

Instalación sobre obra: esta opción implica la construcción de una estructura para fijar el cerramiento de aluminio.
Instalación sobre guías o rieles: en esta opción, el cerramiento se desliza a lo largo de guías que se han fijado previamente.
Instalación autoportante: en esta opción, el cerramiento de aluminio se instala directamente en la terraza o porche, sin necesidad de ninguna otra estructura de soporte.

Acristalamientos disponibles para este tipo de cerramientos

El acristalamiento es una parte fundamental del cerramiento de aluminio ya que debe proporcionar la mayoría de las propiedades de aislamiento (térmico y acústico) del cerramiento.

En los cerramientos de aluminio se pueden instalar diferentes tipos de acristalamientos. Algunas de las opciones más comunes son:

Vidrio con cámara: es una opción que consta de dos o más capas de vidrio separadas por una cámara de aire o gas. Este tipo de vidrio proporciona un buen aislamiento térmico y acústico, lo que lo hace adecuado para cerramientos de aluminio en zonas con altas y bajas temperaturas. Las láminas de vidrio pueden tener también propiedades de protección solar y de resistencia.
Policarbonato: es un material plástico resistente y duradero que se utiliza en estos cerramientos de aluminio. Es una opción popular para quienes desean una solución económica y liviana, ya que es más liviano que el vidrio y a menudo más económico.

Es importante considerar que cada tipo de acristalamiento tiene sus propias ventajas y desventajas, por lo que es importante evaluar cuidadosamente tus necesidades y preferencias antes de tomar una decisión.

Aspectos a tener en cuenta a la hora de elegir un cerramiento de aluminio

Al elegir un cerramiento de aluminio para tu terraza o porche, es importante considerar los siguientes aspectos:

Tipo de cerramiento: ¿quieres un cerramiento fijo, corredero o plegable?
Tamaño y dimensiones de la terraza o porche: esto afectará la cantidad de material necesario y el coste de instalación.
Material de acristalamiento: ¿prefieres vidrio o policarbonato? Cada material tiene sus propias ventajas y desventajas.
Diseño y acabados: ¿deseas que el cerramiento de aluminio se adapte al diseño y arquitectura de tu hogar?

Para finalizar este artículo y a manera de conclusión, queremos dejarte un vídeo de uno de los muchos sistemas de aluminio para cerramientos de terrazas y porches que existen en el mercado. La cantidad de variantes sobre los sistemas básicos que hemos descrito en este artículo es elevada ya que cada casa comercial desarrolla sus propios sistemas aunque tengan características similares.

Como siempre, insistimos en la importancia de asesorarte por un técnico competente y recurras a una empresa especializada en la instalación de este tipo de cerramientos.